La pérdida de un ser querido es un hecho ineludible que forma parte de la vida. Es normal tratar de proteger a los niños, creemos que evitándose les ahorramos sufrimiento, pero es todo lo contrario, los apartamos de un evento fundamental en sus vidas.
Planificar funerales anticipadamente brinda alivio emocional y financiero, respeta los deseos del difunto y evita conflictos familiares. Es un regalo de amor que brinda tranquilidad durante el duelo y honra la memoria del ser querido.